Más de 60 millones para damnificados de Ágata quedaron en el bolsillo de la familia Ricárdez
La inconformidad social volvió a estallar en Santiago Astata, Oaxaca, donde pobladores de una agencia municipal mantienen un bloqueo carretero desde las 4:00 de la mañana en el puente de Zimatán, denunciando lo que califican como un saqueo institucionalizado de los recursos destinados a los damnificados del huracán Ágata, bajo el amparo del poder político local.
De acuerdo con la Agente Municipal de Zimatán, Ivette López Guzmán, las comunidades verdaderamente afectadas por el fenómeno natural nunca recibieron obras ni apoyos reales, pese a que el Gobierno Federal envió ayuda humanitaria, incluyendo electrodomésticos. Los manifestantes acusan que dichos apoyos fueron desviados deliberadamente a la cabecera municipal de Santiago Astata, donde —afirman— no hubo daños de consideración, y que estos bienes fueron repartidos con criterios políticos entre seguidores del grupo en el poder.
La molestia social se agrava, señalan los inconformes, al recordar que el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador autorizó más de 60 millones de pesos extraordinarios para enfrentar la emergencia por Ágata: 30 millones para Dorian Ricárdez Medina, quien concluía su administración, y 30 millones para Óscar Eduardo Ricárdez Medina, quien iniciaba el siguiente periodo como presidente municipal. Para los pobladores, este reparto de recursos benefició a una misma familia, ya que ambos son parientes y —según denuncian— operan bajo la protección política de Carmelita Ricárdez, identificada por los manifestantes como dirigente estatal del PRI.
“Los recursos nunca llegaron a las agencias. No hubo reconstrucción, no hubo apoyos y no hubo justicia. Lo único que se fortaleció fue un proyecto político familiar”, señalaron los pobladores, quienes acusan que Santiago Astata se ha convertido en un feudo político, donde las agencias quedan relegadas mientras se concentra el poder y el presupuesto.
Los manifestantes ofrecieron una disculpa pública por las afectaciones generadas por el bloqueo, pero advirtieron que no levantarán la protesta hasta que exista una respuesta clara. “Basta de la impunidad y del uso patrimonial del municipio; exigimos que se devuelva a las agencias lo que les corresponde”, expresaron.
Finalmente, hicieron un llamado urgente a las autoridades estatales y federales para que intervengan, al considerar que existen suficientes antecedentes y focos rojos de presunta corrupción en la administración municipal de Santiago Astata. De manera directa exigieron al actual presidente municipal, Óscar Eduardo Ricárdez Medina, rendir cuentas y devolver los recursos destinados a los damnificados del huracán Ágata.
